Este viernes 7 de agosto me ha tocado ir a la biblioteca de la plaza de Gipuzkoa. Como aún tengo mi rodilla mal he tardado una eternidad en subir la larga escalinata. Pero por el camino he podido apreciar con detenimiento esta maravillosa vidriera, los cuadros que adornan la escalinata, vamos que me he aburrido... Ganadas por fidelidad, nobleza y lealtad reza el escudo de la ciudad... y cada vez hay menos de esto...