Martes 6 de Mayo. Recorro la ciudad haciendo fotos. No son bonitas, son comerciales. Pero entre trabajo y trabajo a veces veo cosas como las huellas de un hombre solitario que parece querer perderse en la inmensa y solitaria bahia de la concha. No sabe que yo le espio por un agujero. Que bonita es Donosti los martes por la mañana. Casi lo habia olvidado